- Fusagasugá supera el promedio nacional, alcanzando 270 puntos frente a 261.
- Las instituciones rurales y privadas lideran el crecimiento, con promedios de 271 y 286 puntos respectivamente.
- Resultados que reflejan no solo desempeño académico, sino también el esfuerzo, la resiliencia y el compromiso emocional de la comunidad educativa.
Evaluar para comprender, crecer y transformar
Los resultados de las Pruebas Saber 11 de 2025 en Fusagasugá revelan avances significativos que van más allá de lo académico. Evaluar no es únicamente medir conocimientos: es reconocer trayectorias, valorar los contextos y comprender las múltiples formas en que cada joven construye su aprendizaje.
Desde esta perspectiva de evaluación desde el ser, la ciudad no solo celebra puntajes, sino también historias de superación, acompañamiento familiar, dedicación docente y la capacidad de los estudiantes de enfrentar retos académicos y personales.
Resultados generales: un municipio que avanza con sentido humano
El promedio del puntaje global de Fusagasugá para 2025 fue de 270 puntos, ubicándose por encima del promedio nacional (261), consolidando una tendencia positiva en la calidad educativa local.
Este avance refleja el compromiso de un ecosistema educativo que ha entendido que mejorar no es una meta técnica, sino un proceso de crecimiento humano y colectivo.
Fortalezas por zonas y sectores
- Instituciones educativas privadas: alcanzaron 286 puntos, destacándose ampliamente sobre el promedio nacional. Este resultado evidencia prácticas pedagógicas consolidadas y procesos de acompañamiento integral.
- Instituciones rurales oficiales: obtuvieron 271 puntos, lo que confirma el impacto de estrategias que han acercado oportunidades y recursos a territorios históricamente más limitados.
- Instituciones urbanas oficiales: mantuvieron un promedio de 260 puntos, un llamado a fortalecer procesos diferenciados que reconozcan las realidades emocionales, sociales y académicas de los jóvenes en estos contextos.
Una evaluación que reconoce el esfuerzo, no solo el resultado
Los aprendizajes no se expresan únicamente en los puntajes. Cada cifra incluye estudiantes que madrugaron a estudiar, familias que acompañaron en medio de dificultades, docentes que reinventaron sus prácticas y directivos que gestionaron oportunidades para sus instituciones.
Desde el enfoque del ser, estos resultados se interpretan como:
- La capacidad de resiliencia de los estudiantes.
- La construcción progresiva de autonomía y pensamiento crítico.
- La consolidación de ambientes educativos que favorecen el bienestar emocional.
- El trabajo articulado entre escuela, familia y comunidad.
Retos y oportunidades
Aunque los resultados son positivos, aún es necesario cerrar brechas y fortalecer la calidad educativa, especialmente en el sector oficial urbano, esto implica:
- Continuar con la formación docente centrada en la comprensión del estudiante como persona integral.
- Implementar estrategias que reduzcan desigualdades académicas y socioemocionales.
- Potenciar prácticas evaluativas formativas y contextualizadas.
- Ampliar el acompañamiento a las instituciones con menor desempeño.
Una educación que florece desde el ser
Fusagasugá avanza no solo en cifras, sino en la comprensión profunda de que la educación es un camino de crecimiento humano. Los resultados de 2025 nos recuerdan que la evaluación debe servir para orientar, acompañar y transformar, siempre con la convicción de que cada estudiante tiene un potencial que merece ser descubierto y potenciado.
La Secretaría de Educación reafirma su compromiso con una evaluación más humana, justa y pedagógica, que siga fortaleciendo una educación acogedora, inclusiva y de calidad.
